Del pasado 17 al 22 de julio, Leyre Palacios, docente de CIAP en el CIP Huarte, realizó el curso “Positive Thinking, Positive Communication and Positive School Spaces” en Helsinki (Finlandia), dentro del programa de movilidad europeo de ERASMUS+ para el profesorado, ofertado por la plataforma Teacher’s academy.
Hoy, nos relata su experiencia en primera persona.
«Un niño o niña que ha crecido en un ambiente de amor y respeto aprende a amar y respetar a otras personas a lo largo de su vida.»
Esta es la frase con la que comenzamos la formación y que abrió la puerta a muchas reflexiones y actividades sobre la Educación y nuestra contribución, como docentes, a la vida de nuestro alumnado. Una contribución que depende de muchos factores y que requiere, entre otras cosas, de un bienestar emocional personal y una empatía para poder dar y recibir y para poder conectar con ellos y ellas.
Durante el curso, trabajamos mediante pequeños proyectos y dinámicas aspectos tan variados e importantes en la práctica docente como la asertividad, el trabajo de las fortalezas individuales y grupales, la comunicación verbal y no verbal, la construcción de un ambiente de confianza, cómo establecer lazos con las personas, el fomento de la participación en clase, la utilidad del error como herramienta de crecimiento y aprendizaje, el valor del sentido del humor o las distintas prácticas del aprendizaje cooperativo.
Además, practicamos mindfulness y pensamiento positivo, reduciendo la autocrítica negativa con nosotros y nosotras y con las personas que nos rodean y cambiando la comunicación negativa, disruptiva e ineficaz por una comunicación positiva y no violenta, fueron la clave para crear atmósferas de trabajo basadas en el respeto, gratitud y honestidad.
Como se observa a vista de pájaro, Finlandia tiene muy buena conexión con los alrededores y eso es clave para disfrutar del país. Seguir buscando la conexión tanto con compañeros y compañeras como con el alumnado resaltando las virtudes y fortalezas es fundamental para crear una buena atmósfera y permitir el crecimiento individual y colectivo.
Aunque a veces la mente esté hecha un lío y no sepa muy bien cuál es el camino a seguir, buscar el lado positivo incluso de las situaciones más complicadas, será el objetivo para vivir la vida con serenidad y con conexión al aquí y ahora.
Nuestro autocuidado a lo largo de la estancia también ha sido importante y Emilia (la profesora) nos dio algunas sugerencias para poder realizarlo. De ahí que visitamos una sauna en una isla, nos bañamos en el mar Báltico, descubrimos Helsinki y visitamos rincones con mucho encanto.
Sin duda, todo ha contribuido a tener una experiencia muy gratificante y enriquecedora de la que he aprendido muchísimo. ¡¡¡Animáos a participar en las movilidades Erasmus+ para profesorado!!! Son una gran oportunidad para descubrir cómo se trabaja en otros países.
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